Estas diez señales podrían indicar que una relación tiene futuro

Jueves 22 de Noviembre del 2018

No hay bolas de cristal que valgan, pero si estos indicios se cumplen es porque la cosa pinta bien

Estas diez señales podrían indicar que una relación tiene futuro

Puede que todo no esté perdidoº (filadendron / Getty Images)

A pesar de los típicos finales de cuento de ‘y fueron felices y comieron perdices’, todo aquel que haya tenido una pareja sabe que las cosas no siempre son fáciles. Según el carácter de cada persona y en función del tipo de vínculo establecido, surgirán diferentes problemas.

Desde hace unos años es frecuente oír hablar de lo que se conoce como relaciones tóxicas, por lo general, aquellas que te producen mayor ansiedad o malestar que satisfacción, además –en la mayoría de los casos– de tener ese componente ‘adictivo’ que te engancha y por el cuál te resulta muy difícil acabar con ellas.

Cuando conoces a alguien, es difícil averiguar qué te deparará el destino junto a esa persona o cómo evolucionará todo. No obstante, siempre hay pequeñas señales que pueden ayudarte a determinar si la cosa no pinta bien desde el inicio o, por el contrario, si merece la pena seguir conociéndose.

“Aunque es complicado predecir si una relación tiene futuro o no, existen algunos aspectos generales que podrían indicar una base sólida para construir algo duradero y, sobre todo, de calidad”, aclara Sara Villoria, psicóloga de Nexo Psicología Aplicada y creadora de @PsicologiaRiot.

Como siempre nos ponemos muy negativos y en estado de alerta sobre todo aquello que debe hacerte ‘huir como de la peste’, aquí una dosis de positividad y optimismo de la mano de Villoria sobre los ingredientes clave que sí te sugieren que deberías darle una oportunidad a la relación:

1. Reciprocidad

Cuando hay un equilibrio y una correspondencia entre lo que cada uno aporta, dado que es una variable muy importante para generar relaciones igualitarias –como por ejemplo repartirse las tareas…¡ejem!–, donde las personas se sientan queridas y respetadas.

2. Cosas en común

No se trata de ser ‘almas gemelas’, ‘la media naranja’ ni este tipo de topicazos. Tampoco de compartirlo todo, pero la experta resalta que sí es interesante y enriquecedor cuando existe un punto de unión importante como una afición, amistades comunes, el interés sobre algún tema…

3. Apoyo

Aquello de: ‘en lo bueno y en lo malo, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad…’ suena un tanto lapidario y tremendista, pero tiene su parte de razón. “La pareja también supone poder contar con el otro, tener una ayuda incondicional que nos aporte seguridad y tranquilidad”, sentencia la psicóloga. No hay nada mejor que alegrarse por las buenas noticias del otro.

4. Comunicación sana

La máxima posible, eso sí, siempre y cuando sea saludable. Villoria matiza que debemos aprender a resolver los conflictos y desacuerdos a través de nuestra capacidad de negociación y, en ocasiones, aprendiendo a ceder: “Hay que adquirir las habilidades adecuadas para solventar y poder crecer como pareja”, señala.

5. Diversión

Reírse juntos, disfruta de la compañía del otro… sobran los ejemplos para saber que todo este tipo de situaciones positivas ayudan a reforzar el vínculo y aumentar el deseo.

6. Dedicar tiempo y esfuerzo

Este es uno de los mayores handicaps para muchas parejas, pues se entiende que ese espacio adjudicado a la relación ha de ser deseado y placentero (y no una obligación).

7. Matemáticas simples

El esquema es claro y conciso: sumar y no restar. “No se trata de que el otro nos complete, ya somos suficientes, sino de un compañer@ de viaje que haga el camino más emocionante y lleno de posibilidades”, aclara Villoria.

8. Un objetivo común

No hablamos solo de casarte o de tener hijos, sino de tener unos objetivos vitales o un plan de vida que no sean completamente opuestos y que vayan en la misma dirección. Al principio estas cosas no afectan, pero a la larga sí pueden suponer un problema.

9. Confianza

Trabajar en este punto es clave, puesto que estar en un continuo recelo o poniendo en duda al otro cada dos por tres tan solo genera sentimientos y situaciones negativas. La confianza en muchos sentidos es un sinónimo de estabilidad.

10. Conservar un pequeño espacio

Así como también es positivo tener cosas en común, también es saludable tener ese pequeño reducto de independencia, sin que sea algo reprochable por parte del otro: desde amistades a una afición que ayuden a que no os aisléis ni os hagan perder vuestra individualidad.

Fuente: http://ow.ly/EwdV30mIbRp